El alumno de la Universidad Autónoma de Baja California Sur (UABCS), Kevin Martínez, desarrolla un proyecto denominado “DIPP”, que consiste en un dispensador de pastillas electrónico para personas que padecen de hipertensión.
El sistema permite almacenar, distribuir y gestionar la medicación del usuario, según las indicaciones del médico; además que ofrece una experiencia más estimulante que un pastillero convencional.
El joven universitario, quien cursa la carrera de Ingeniería en Tecnología Computacional, indicó que el moderno aparato es muy fácil de utilizar, ya que cuenta con tres botones que permiten configurar los dos contenedores interiores donde se almacenan las pastillas.
Previamente, el usuario debe programar la dosis apropiada y las horas en que debe suministrarse el medicamento. Después de realizar esta acción, el dispositivo indicará por medio de un reloj, el momento justo para tomar las píldoras pertinentes.
Kevin Martínez señaló que olvidar tomar los medicamentos correspondientes a la hora exacta es algo muy común en los pacientes, pero es más delicado cuando esto ocurre con personas de la tercera edad, quienes muchas veces dependen de algún familiar para no olvidar suministrar la dosis que necesitan para tratar algún padecimiento.
Es este precisamente el objetivo de “DIPP” según Kevin Martínez, evitar que los pacientes con hipertensión olviden tomar sus pastillas, ya que eso puede afectarles gravemente en su salud durante el tratamiento.
Dio a conocer que comenzó con este prototipo aproximadamente hace 3 años junto con otro compañero, aunque por motivos distintos lo abandonaron. Hace apenas unos meses él decidió retomarlo como parte de un proyecto escolar y su intención es seguir implementando mejoras tecnológicas para que sea un dispositivo más efectivo, eficiente y, sobre todo, económico, pues aunque existen aparatos similares, llegan a tener precios muy elevados.
“Creo que sería de gran ayuda para la sociedad que este dispositivo pudiera salir al mercado. Sería de mucha ayuda para las personas que tienen una rigurosa rutina de ingesta de pastillas para el tratamiento de una enfermedad. Mi idea es reducir los costos lo más posible, para que, de salir al mercado, pudiera ser accesible a todo público”, subrayó.