Al presidir una reunión de trabajo con el Comité de Planeación Institucional, el rector de la Máxima Casa de Estudios del estado, Arturo Dante Salgado González, solicitó que en cada acción que se incorpore al Programa de Planeación y Desarrollo Institucional 2019-2023 (PROPLADI), estas deberán responder al modelo de Responsabilidad Social Universitaria (RSU).
“Lo que debemos hacer es tomar todas las fortalezas de la UABCS y darles una mayor orientación hacia la RSU, trabajo que venimos haciendo desde hace tiempo, pero que es necesario que esté mejor articulado y responda a esta filosofía de trabajo, que es ya una tendencia global de cara a los retos que vive el mundo”, indicó el rector.
Vale la pena señalar que, este Comité de Planeación lo integran directivos de la institución, quienes trabajan de manera conjunta con las áreas académicas y se encargan de la elaboración, actualización, evaluación y seguimiento del PROPLADI para los años 2019 al 2023; es decir, son los responsables de generar la misión, visión, políticas y los valores; así como de la estructuración del documento por ejes, programas y subprogramas.
Salgado González, destacó la importancia de que el trabajo que se realiza en UABCS impacte mayormente en la sociedad, que es hacia donde deben encaminarse los trabajos y beneficios de sus acciones y obras.
Señaló también que, actualmente la UABCS tiene un amplio número de proyectos que están en concordancia con lo que marca la agenda 2030, sin embargo, dijo que estos proyectos deben incidir aún más en la conciencia social para tengan un impacto más profundo.
“Este será el gran reto, más allá de las bases conceptuales y de la especificación de metas que marque el PROPLADI, este cambio de paradigma debe quedar plasmado en cada acción que llevemos a cabo la comunidad universitaria en los procesos de formación, investigación, extensión, vinculación y gestión”, subrayó.
Destacó además que, este cambio de modelo debe ir a fondo, debe tocar todas las estructuras y que la hagan propia todos los universitarios, académicos, administrativos e incluso los propios alumnos.
Este documento deberá estar terminado para el próximo mes de octubre, para que este a su vez, sea turnado para su revisión y en su caso, posible aprobación del Consejo General Universitario.